El extraño estudio que relaciona la belleza con la longevidad

Estudios recientes sugieren una correlación entre la belleza y la longevidad, aunque se necesitan más investigaciones para establecer una relación causal.

¿La belleza es sinónimo de longevidad? Un estudio revela datos sorprendentes

¿Alguna vez te has preguntado si las personas consideradas atractivas viven más tiempo? Un reciente estudio científico ha desvelado datos interesantes al respecto. Investigadores analizaron fotografías de anuarios de miles de estudiantes graduados en la década de 1950 y las compararon con sus registros de mortalidad décadas más tarde. Los resultados sugieren que existe una relación entre el atractivo físico y la esperanza de vida, pero no de la manera que podríamos esperar.

La genética juega un papel crucial en la determinación de la belleza y podría influir en la susceptibilidad a enfermedades, afectando así la longevidad.

La ciencia detrás de la belleza: más allá de lo superficial

¿Qué determina que una persona sea considerada atractiva? La belleza es un concepto subjetivo y culturalmente variable, pero los científicos han identificado ciertos rasgos faciales y corporales que tienden a ser valorados universalmente. Sin embargo, el atractivo no solo se reduce a la apariencia física. Estudios han demostrado que factores como la simetría facial, la proporción áurea y la salud general pueden influir en nuestra percepción de la belleza. “Se sabe poco sobre la asociación entre el atractivo facial y la longevidad”, escriben el científico social Connor Sheehan, de la Universidad Estatal de Arizona, y el economista Daniel Hamermesh, de la Universidad de Texas en Austin, en su artículo publicado. “Pero el atractivo puede transmitir una salud subyacente y estructura sistemáticamente procesos críticos de estratificación social”.

El papel de la genética en la longevidad y la belleza

La genética juega un papel fundamental en la determinación de nuestra esperanza de vida. Los científicos han identificado numerosos genes asociados con la longevidad, que influyen en procesos como el envejecimiento celular, la reparación del ADN y la respuesta al estrés. Además de los genes, factores epigenéticos, como la metilación del ADN, también pueden afectar la expresión génica y, por lo tanto, la longevidad.

Un estudio revelador: ¿qué dice la ciencia?

En el estudio mencionado anteriormente, los investigadores pidieron a un grupo de jueces que calificaran el atractivo de las fotografías de los estudiantes de secundaria. Luego, compararon estas calificaciones con los registros de mortalidad de los participantes. Los resultados mostraron que las personas consideradas menos atractivas tenían un mayor riesgo de morir a una edad temprana, en comparación con aquellas calificadas como promedio o muy atractivas.

Este concurso de belleza se utilizó para dividir a los individuos en seis categorías diferentes, calificadas de mayor a menor atractivo. Utilizando el Índice Nacional de Mortalidad, se compararon las defunciones del grupo hasta 2022, cuando tenían poco más de 80 años. Al final del periodo de seguimiento, había fallecido casi el 43 por ciento de los individuos de la muestra.

Aquellos en el sextil más bajo en términos de atractivo tenían un 16,8 por ciento más de riesgo de muerte que los situados en los cuatro sextiles intermedios. No obstante, la diferencia en la tasa de mortalidad entre los cuatro sextiles medios y los individuos más atractivos en el sextil superior no fue considerable. “En general, descubrimos que las personas cuyo atractivo facial se ubicó en el sextil menos atractivo presentaban un riesgo de mortalidad más alto a lo largo de la vida en comparación con aquellos considerados de atractivo promedio o alto”, indican Sheehan y Hamermesh.

¿Por qué las personas menos atractivas podrían vivir menos?

Los científicos aún no tienen una respuesta definitiva a esta pregunta, pero existen varias hipótesis. Una posibilidad es que el atractivo físico pueda ser un marcador de buena salud subyacente, ya que personas con sistemas inmunológicos fuertes y estilos de vida saludables tienden a tener una apariencia más saludable. Otra explicación podría ser que las personas consideradas atractivas reciben un trato preferencial en la sociedad, lo que podría tener un impacto positivo en su salud mental y física.

La percepción de la belleza es culturalmente variable y puede cambiar con el tiempo, lo que dificulta establecer una definición universal.

Para seguir pensando

Si bien el atractivo físico puede jugar un papel en la longevidad, es importante destacar que no es el único factor determinante. Otros factores como el estilo de vida, la dieta, el ejercicio, el estrés, las relaciones sociales y el acceso a atención médica también influyen significativamente en nuestra esperanza de vida. Además, factores socioeconómicos como el nivel educativo, los ingresos y las condiciones de vida pueden tener un impacto importante en la salud y la longevidad.