Los Titanosaurios Gigantes Prehistóricos se originaron durante el período Cretácico temprano, adaptándose a una variedad de climas y paisajes a medida que los continentes se separaban.
La diversidad de formas y adaptaciones de los anolis revela una evolución constante. Desde colas prensiles hasta cuerpos aplanados, muestran cómo diferentes especies evolucionan ante desafíos ambientales similares de manera convergente.