Contacto

[email protected]

El ADN humano encontrado en los dientes de leones y su leyenda

El análisis reveló que el ADN encontrado en los dientes de los leones incluía restos humanos, confirmando que los felinos devoraron personas.
Comparte este artículo

Los científicos analizaron cuidadosamente los dientes de los leones, descubriendo fragmentos de ADN humano que se conservaron durante más de un siglo en sus mandíbulas.

CONTENIDOS

Los leones de Tsavo comían humanos

En 1898, dos leones sin melena aterrorizaron a los trabajadores ferroviarios en Tsavo, Kenia. Un análisis reciente de ADN confirmó que estos felinos consumieron carne humana. Investigadores del Field Museum de Chicago analizaron fragmentos de ADN encontrados en sus dientes, resolviendo un misterio de más de un siglo. Los resultados, publicados en Current Biology, mostraron que, además de humanos, los leones consumieron varias especies de herbívoros. Este hallazgo ha generado nuevas preguntas sobre el comportamiento inusual de estos leones, que cazaban de noche y atacaban a sus presas humanas mientras dormían. Pero lo más intrigante es la ausencia de sus presas habituales, como los búfalos.

En los dientes de los leones se encontraron rastros de ADN humano, una evidencia clave para resolver el misterio de los ataques en Tsavo hace más de 100 años.

Un cambio en la dieta debido a la rinderpest

La enfermedad rinderpest, una epidemia que afectó a la fauna en ese periodo diezmó las poblaciones de búfalos, forzando a los leones de Tsavo a cazar humanos. Este fenómeno podría explicar por qué estos felinos, que normalmente evitarían a los humanos, los vieron como una fuente de alimento. “Los humanos eran una presa más fácil en comparación con los búfalos, que habían sido su principal fuente de alimento,” explicó Thomas Gnoske, ecólogo del Field Museum. El análisis de ADN permitió a los científicos reconstruir la dieta de los leones, revelando que su comportamiento fue alterado por las condiciones del entorno. Este cambio fue crucial para entender su comportamiento predador.

Dientes dañados influyeron en la elección de presas

Además de la rinderpest, los leones de Tsavo tenían otra desventaja: dientes severamente dañados. Esta condición les habría dificultado cazar animales grandes como los búfalos. “Los dientes dañados de estos leones limitaron su capacidad de cazar presas fuertes,” señalaron los investigadores. Al analizar las mandíbulas de los leones, los científicos encontraron que ambos presentaban desgaste significativo, lo que los llevó a buscar presas más accesibles. Los humanos, en comparación con los búfalos o jirafas, eran más fáciles de capturar. Este factor, combinado con la disminución de las presas habituales, podría haber sido determinante en su comportamiento.

Te Puede Interesar:

Domesticación del caballo: Un análisis científico revelador: El ADN humano encontrado en los dientes de leones y su leyenda

El análisis de ADN reveló una dieta diversa

El ADN recuperado de los dientes de los leones mostró una dieta diversa, incluyendo jirafas, cebras y antílopes, pero no búfalos. “El ADN humano fue el más sorprendente,” comentó Gnoske, destacando lo inusual del hallazgo. Los científicos utilizaron técnicas avanzadas de secuenciación de ADN para identificar los restos, lo que permitió rastrear con precisión las especies que formaban parte de su dieta. Este enfoque ha permitido a los investigadores reconstruir los eventos de 1898 con mayor claridad. Los resultados fueron publicados en Current Biology y ofrecieron una nueva perspectiva sobre el comportamiento de estos temidos depredadores.

Un caso raro pero bien documentado

Aunque los ataques de leones a humanos son raros, el caso de Tsavo sigue siendo uno de los episodios más documentados en la historia de la vida salvaje africana. Este caso particular ha sido estudiado durante más de un siglo, y los nuevos análisis de ADN han proporcionado información clave sobre el comportamiento inusual de estos leones. “Este episodio ha sido objeto de estudio debido a su singularidad,” explicaron los investigadores. A pesar de la rareza de estos ataques, los estudios continúan arrojando luz sobre los factores que llevaron a estos leones a desarrollar un comportamiento tan poco común.

una visión general por pasos de los análisis moleculares y bioinformáticos utilizados para identificar las especies de presas a partir del pelo compactado en las cavidades de los dientes de los leones.

Para seguir pensando

Los leones de Tsavo siguen siendo un caso único en la biología de depredadores africanos. Los resultados de este análisis de ADN han resuelto parte del misterio que rodeaba sus ataques, pero el comportamiento de estos leones aún plantea muchas preguntas. Los científicos continúan estudiando el caso para entender mejor cómo las condiciones ambientales y biológicas influyeron en su elección de presas. “El ADN ha revelado aspectos importantes del comportamiento predador en condiciones extremas,” concluyeron los autores del estudio. Los leones de Tsavo, más de 100 años después de sus ataques, siguen siendo un tema fascinante para los investigadores.