¿Porqué la tierra no es plana?

Erastóstenes fue un matemático y astrónomo griego que vivió en el siglo III a.C. Él fue el primero en medir la circunferencia de la Tierra con un método ingenioso. Observó que en la ciudad de Siena, en Egipto, el Sol se encontraba en el cenit al mediodía del solsticio de verano, mientras que en Alejandría, más al norte, proyectaba una sombra. Usando la distancia entre las dos ciudades y el ángulo de la sombra, calculó que la Tierra tenía unos 40.000 km de circunferencia, con un error de solo el 15%. Su experimento demostró que la tierra no es plana y que se podía medir su tamaño con geometría.

¿Qué argumentos utilizan los terraplanistas para defender que la Tierra es plana? Esta es una pregunta que muchos se hacen al escuchar las afirmaciones de este movimiento, que niega la evidencia científica y astronómica que demuestra la forma esférica de nuestro planeta.

La forma de la Tierra se puede observar desde el espacio

Una de las formas más sencillas de comprobar que la Tierra no es plana es observarla desde el espacio. Gracias a los satélites y las misiones espaciales, podemos ver imágenes de nuestro planeta que muestran claramente su forma esférica. Además, la sombra que proyecta la Tierra sobre la Luna durante los eclipses lunares también revela su curvatura. Estas evidencias visuales son difíciles de negar y contradicen la idea de que la Tierra es un disco plano.

La gravedad explica por qué no caemos del borde

Otro argumento que desmiente la teoría de la Tierra plana es el de la gravedad. Según esta fuerza física, los objetos se atraen entre sí proporcionalmente a sus masas e inversamente al cuadrado de la distancia que los separa. Esto significa que la Tierra, al ser un cuerpo muy masivo, ejerce una atracción gravitatoria sobre todo lo que hay en su superficie, incluidos nosotros. Por eso no caemos del borde, sino que estamos pegados al suelo. La gravedad también explica por qué la Luna orbita alrededor de la Tierra y por qué las mareas siguen un ciclo regular. La gravedad explica por qué todos los objetos grandes del universo tienden a ser esféricos.

El movimiento de los astros demuestra que la tierra no es plana

Los terraplanistas defienden la idea que si la Tierra fuera redonda y girara sobre su eje, se produciría un efecto Coriolis que haría imposible el vuelo de los aviones, los disparos de larga distancia o el lanzamiento de cohetes. Según ellos, el movimiento de rotación de la Tierra haría que estos objetos se desviaran de su trayectoria original y no llegaran a su destino. Sin embargo, este argumento también es falso, ya que el efecto Coriolis sí existe y se tiene en cuenta en todos estos casos.

El efecto Coriolis es una fuerza ficticia que actúa sobre los objetos en movimiento en un sistema de referencia rotatorio, como la Tierra. Esta fuerza hace que los objetos se desvíen hacia la derecha en el hemisferio norte y hacia la izquierda en el hemisferio sur. Sin embargo, esta desviación es muy pequeña y solo se nota en distancias o tiempos muy largos. Por eso, los aviones, los disparos o los cohetes compensan esta fuerza con sus sistemas de navegación o guiado.

La diferencia horaria confirma que la tierra no es plana

Otra prueba de que la Tierra no es plana es la existencia de la diferencia horaria. Si viviéramos en un disco plano, todos tendríamos el mismo huso horario y veríamos el Sol al mismo tiempo. Sin embargo, sabemos que hay lugares donde es de día cuando en otros es de noche, y viceversa. Esto se debe a que la Tierra es una esfera que recibe la luz del Sol en una de sus caras, mientras que la otra queda en sombra. A medida que la Tierra gira, las zonas iluminadas y las oscuras van cambiando, creando así los distintos husos horarios.

La Tierra no solo tiene forma esférica, sino que además gira sobre sí misma y alrededor del Sol. Esto se puede comprobar observando el movimiento de los astros en el cielo. Por ejemplo, el Sol sale por el este y se pone por el oeste cada día, lo que indica que la Tierra rota en sentido contrario a las agujas del reloj. Asimismo, las estrellas cambian de posición a lo largo de la noche y a lo largo del año, lo que muestra que la Tierra se desplaza por una órbita elíptica alrededor del Sol.

La tierra no es plana: La presión atmosférica

Los terraplanistas sostienen que si la Tierra fuera redonda y tuviera una atmósfera compuesta por diferentes gases, se produciría una presión atmosférica que variaría según la altitud y la temperatura. Según ellos, esto no ocurre y la presión atmosférica es constante en cualquier lugar del mundo. Sin embargo, este argumento también es falso, ya que la presión atmosférica sí existe y sí varía según la altitud y la temperatura.

La presión atmosférica es la fuerza que ejerce el peso del aire sobre una superficie. Esta fuerza depende de la densidad del aire, que a su vez depende de la altitud y la temperatura. A mayor altitud, menor densidad y menor presión. A mayor temperatura, menor densidad y menor presión. Por eso, los aviones tienen que presurizar sus cabinas para mantener unas condiciones de confort para los pasajeros y los instrumentos meteorológicos tienen que corregir las mediciones de presión según la altitud y la temperatura.

La navegación marítima y aérea se basa en la geometría esférica

Otro argumento frecuente de los terraplanistas es que si la Tierra fuera redonda, los aviones tendrían que inclinarse constantemente hacia abajo para seguir la superficie del planeta y no salirse al espacio. Según ellos, esto no ocurre y los aviones vuelan siempre en línea recta y nivelados. Sin embargo, este argumento tampoco tiene sentido, ya que los aviones no vuelan por inercia, sino que están sujetos a la fuerza de gravedad y a las leyes de la aerodinámica. Los aviones se ajustan automáticamente a la curvatura de la Tierra gracias al sistema de control de vuelo, que mantiene el ángulo de ataque y la altitud adecuados para generar sustentación.

La navegación marítima y aérea también se apoya en el hecho de que la Tierra es una esfera. Los navegantes y los pilotos utilizan sistemas de coordenadas geográficas, como la latitud y la longitud, para ubicarse y orientarse en el globo terráqueo. Estas coordenadas se definen a partir de líneas imaginarias que recorren la superficie terrestre, como el ecuador y los meridianos. Estas líneas son círculos o arcos de círculo que solo tienen sentido si la Tierra es una esfera, no un plano.

La tierra no es plana y se puede medir con experimentos sencillos

Uno de los argumentos más comunes de los terraplanistas es que no se percibe ninguna curvatura en el horizonte, ni siquiera desde un avión o un globo aerostático. Según ellos, esto prueba que la Tierra es plana y que la curvatura es una ilusión creada por las lentes de las cámaras o los efectos atmosféricos. Sin embargo, este argumento ignora el hecho de que la Tierra es muy grande y que la curvatura solo se puede apreciar desde una altura muy superior a la que alcanzan estos medios de transporte. De hecho, se estima que se necesita estar a unos 10.000 metros de altura para empezar a notar la curvatura del horizonte.

No hace falta ir al espacio o tener instrumentos sofisticados para comprobar que la Tierra no es plana. Con algunos experimentos sencillos se puede medir su curvatura desde la superficie. Por ejemplo, si colocamos un palo vertical en el suelo y medimos su sombra a diferentes horas del día, veremos que esta varía según el ángulo que forma el Sol con el palo. Este ángulo depende de la latitud en la que nos encontremos y de la inclinación del eje terrestre. Otro experimento consiste en observar el horizonte desde una altura elevada, como una montaña o un edificio. Veremos que el horizonte no es una línea recta, sino que tiene una ligera curvatura.

las estrellas están tan lejos

Otro argumento que emplean los terraplanistas es que si la Tierra fuera redonda y orbitara alrededor del Sol, se producirían cambios drásticos en el cielo nocturno a lo largo del año. Según ellos, las estrellas deberían cambiar de posición y desaparecer según la posición relativa de la Tierra y el Sol. Sin embargo, este argumento también es erróneo, ya que las estrellas sí cambian de posición y desaparecen según las estaciones del año. Lo que ocurre es que las estrellas están tan lejos que su movimiento aparente es muy lento y solo se puede apreciar con instrumentos astronómicos o con observaciones prolongadas. Por eso, las constelaciones parecen mantenerse fijas durante una noche, pero cambian a lo largo del año.

El campo magnético terrestre

Los terraplanistas piensan que si la Tierra fuera redonda y tuviera un campo magnético generado por su núcleo metálico, se producirían interferencias electromagnéticas que afectarían al funcionamiento de los dispositivos electrónicos, como los móviles o los GPS. Según ellos, esto no ocurre y los dispositivos funcionan perfectamente en cualquier lugar del mundo. Sin embargo, este argumento también es falso, ya que el campo magnético terrestre sí existe y sí afecta a los dispositivos electrónicos, pero de forma muy débil y controlable.

El campo magnético terrestre es una capa protectora que rodea al planeta y que lo defiende de la radiación solar y cósmica. Este campo tiene una intensidad muy baja, de unos 50 microteslas, y una orientación que varía según la latitud y la longitud. Por eso, los dispositivos electrónicos tienen que calibrarse según la posición geográfica y la declinación magnética, que es el ángulo entre el norte geográfico y el norte magnético.

Para seguir pensando

Finalmente, la teoría de la Tierra plana se puede refutar con la lógica y el sentido común. Si la Tierra fuera un disco plano, ¿qué habría en su borde? ¿Qué impediría que el agua o el aire se escaparan al vacío? ¿Qué explicaría los fenómenos naturales como los terremotos o los volcanes? ¿Por qué los científicos, los gobiernos y las organizaciones a mentir sobre la forma de la Tierra? Estas son algunas de las preguntas que los defensores de la Tierra plana no pueden responder de forma coherente y razonable.